La Mansión de Aldrich Killian fue la residencia privada del científico multimillonario Aldrich Killian, ubicada en la costa de Miami, Florida.
Historia[]
Transmisiones del Mandarín[]
Aldrich Killian usó su propia mansión en Miami como base principal para comandar las transmisiones de las amenazas que Trevor Slattery, haciéndose llamar el "Mandarín", realizaba. A fin de simular una base terrorista ubicada en Pakistán o Afganistán, Killian decoró la casa con artefactos de guerra y tenía pantallas verdes en las cuales crear efectos cinematográficos.
Después de la Destrucción de la Mansión de Anthony Stark, Killian recibió una llamada de Eric Savin, informándole sobre el exitoso asesinato de Stark. Killian terminó la llamada rápidamente mientras se preparaba para intervenir nuevamente todas las redes del mundo y ser testigo de una de las nuevas amenazas del Mandarín.[1]
Secuestro de Virginia Potts[]
Tras ser secuestrada por Killian, Virginia Potts fue llevada a la mansión junto a Maya Hansen, quien se reveló como una colaboradora de Killian en Ideas Mecánicas Avanzadas. Con la intención de obligar a Stark a perfeccionar el suero Extremis, Killian encerró a Potts en un cuarto de la mansión y le inyectó el suero, causándole un terrible dolor.[1]
Infiltración de Anthony Stark[]
Anthony Stark rastreó el origen de las transmisiones del Mandarín a la Mansión de Aldrich Killian en Miami, logrando derrotar a todos los guardias de seguridad usando una variedad de artilugios caseros. Stark localizó e interrogó a Trevor Slattery, descubriendo rápidamente que el Mandarín era en realidad un señuelo para encubrir los experimentos ilegales de Killian. Ante la presión que sentía, Slattery le confesó a Stark que él en realidad era una actor británico fracasado y que Killian lo había contratado para ser la cara visible de sus planes a cambio de vivir en una mansión llena de lujos y más regalías. Mientras Stark asimilaba lo que estaba oyendo, Eric Savin apareció y lo noqueó.
Al verlo despertar, Maya Hansen saludó a Stark y le pidió ayuda en la tarea de estabilizar el suero Extremis, sin embargo, él trató de hacerle redimirse y liberarlo. En ese momento, Killian apareció y le recordó a Stark la noche en que lo había ignorado en Suiza en el año 1999, señalándole que la desesperación que sintió lo llevó a fundar Ideas Mecánicas Avanzadas desde el anonimato. Para vengarse de Stark, Killian le mostró una proyección en vivo del lugar al que habían transportado a Virginia Potts, burlándose de él por ver el dolor que estaba sintiendo la mujer que amaba sin poder hacer nada.
Al notar que Killian estaba yendo muy lejos, Hansen trató de pedirle liberar a Stark, advirtiéndole que se suicidaría con una sobredosis de Extremis si no seguía sus indicaciones. Para sorpresa de ambos, Killian no se inmutó y le disparó a Hansen, causándole una muerte instantánea. Stark llamó maniático a Killian por la frialdad de sus actos, pero él simplemente siguió con su charla sobre sus planes finales antes de marcharse.[1]
Secuestro de James Rhodes[]
James Rhodes fue llevado a la mansión de Killian después de ser capturado en Pakistán. Durante su tiempo en la mansión, Killian se encontró con Rhodes secuestrado y lo obligó a salir de la armadura de Iron Patriot aplicando calor en ésta. Cuando Rhodes salió de la armadura, se sorprendió del hecho de que Killian pudiera lanzar rayos de fuego por la boca, justo antes de que Eric Savin lo noqueara.
Orgulloso de lo bien que estaban saliendo sus planes, Killian declaró que dentro de pocas horas tendría a dos dirigentes mundiales bajo su mando, y que esto le daría el control total de la Guerra contra el Terrorismo. Habiéndole indicado a Savin su misión de infiltrarse en el Air Force One para secuestrar al Presidente Matthew Ellis, Killian se marchó para seguir con la siguiente fase del plan.[1]
Liberación de Anthony Stark[]
Cuando la armadura Mark XLII de Anthony Stark terminó de cargarse en la casa de Harley Keener, se dirigió a la ubicación de Stark, quien seguía secuestrado en la mansión. A pesar de que Stark le advirtió a los guardias que lo liberaran o los mataría, los dos se burlaron de él, hasta que las diferentes piezas del traje llegaron volando y Stark derrotó con éxito a todos sus captores.
Sabiendo que Aldrich Killian ya no estaba en el lugar y que Eric Savin tenía la armadura de Rhodes, Stark trató de seguir al secuaz, pero su traje no se lo permitió a causa de que el sistema de vuelo aún estaba averiado. Stark halló una batería de automóvil en el patio y recorrió la mansión cargando su armadura con ésta, hasta que pudo hacer contacto con Rhodes.
Al recuperar la conciencia, Rhodes le contó a Stark que el Presidente Ellis estaba en peligro, así que interrogaron a Trevor Slattery para saber qué estaba tramando Killian. Al enterarse que tendrían que dirigirse al Norco, el dúo le pidió a Slattery su lancha deportiva y abandonaron la mansión para rescatar a Ellis y posteriormente a Potts.[1]