- "¿Te dije que tuve una hija? Y puse mi esperanza en un ser superior, tuve fe en que la salvaría y murió y él no hizo... nada. Ahora entiendo que mi hija ha tenido mucha suerte de no tener que crecer oprimida en un mundo de sufrimiento y penas controlado por dioses crueles."
- ―Gorr a Thor
Gorr fue un humilde creyente a los dioses, al igual que a su hija Amor, sin embargo, cuando su especie se quedo sin agua, ni alimentos, Gorr perdió a su hija por falta de eso, descubriendo que a los dioses no les importaba nadie, decepcionándolo, obteniendo la Necroespada totalmente negra, y jurando acabar con todos los dioses por venganza. Siendo apodado como El Carnicero de Dioses.
Poco después, Gorr inició un conflicto con Thor, secuestrando a varios niños de Nuevo Asgard como rehenes, ya que necesitaba el Rompetormentas para abrir el Puente Bifrost, y pedir la muerte de los dioses por el deseo de la Eternidad. Gorr le tendería una trampa a Thor, Jane Foster, y Brunnhilde, tomando la arma, y llegando hacía Eternidad, antes de ser confrontado por Thor, Foster, y los niños, quienes destruyeron su espada. Llegando con Eternidad, Gorr fue convencido por Thor para dejar su odio, deseando que su hija reviviera, y con sus últimas fuerzas, le pidió a Thor cuidar a Amor, antes de fallecer.
Biografía[]
Vida temprana[]
Admirando a Rapu[]
Gorr nació en un planeta sin nombre y tuvo una hija. Él y su hija, le rezaban constantemente a su dios Rapu de su planeta, mientras su hija hacía dibujos de él en una roca, Gorr le rezaba. Tenía la cabeza llena de tatuajes con símbolos de su devoción por Rapu. Sin embargo, a pesar de sus oraciones de Gorr hacia Rapu, la gente de su pueblo, murieron por el calor también la falta de comida y agua, dejando solo a Gorr y su hija cada vez más débil.[1]
Perdiéndolo todo[]
Perdiendo a su hija[]
Algún tiempo después, después de la muerte de su gente, Gorr se vio obligado a llevar a su hija al altar, y Gorr le suplicó a Rapu que les proporcionará alimento y agua para su hija, Sin embargo, cuando Gorr notó que su hija estaba a punto de morir por falta de comida y agua, Gorr la acunó en sus brazos y le dijo a su hija que iba a haber una gran tierra y agua para ellos, pero su hija estando debilitada solo le dijo a Gorr que estaba cansada antes de fallecer en sus brazos.[1]
Obteniendo la Necroespada[]
- "La espada te eligió. Ahora estás maldito."
"¿Qué raro? No parece una maldición, parece una promesa. Y este es mi juramento: Todos los dioses morirán." - ―Rapu y Gorr
Debilitado junto a la tumba de su hija, Gorr esperaba morir junto a ella, antes de ser llamado por una misteriosa voz, caminando hacia donde le indicaba, descubriendo un bosque paradisíaco, donde se cortó accidentalmente con una espada, pero su mano se regeneró. Gorr logró encontrar agua y frutas, por lo que comenzó a comer para sobrevivir, dándose cuenta de que le pertenecían a su dios Rapu, sorprendiéndose al verlo, inclinándose ante él, pidiendo obtener su eterna recompensa por su lealtad hacia él.
Gorr pensó que Rapu celebraba su lealtad, descubriendo con decepción que era una mentira, ya que Rapu celebraba por haber derrotado al Señor de las Sombras Oscuras, el portador de la peligrosa Necroespada totalmente negra, debido a que amenazó con matarlo a él junto a su imperio. Respondiendo a Rapu, Gorr le dijo que ya no habían discípulos para un nuevo imperio, aunque Rapu sabía que siempre tendría nuevos, haciendo llorar a Gorr porque sus hermanos y hermanas murieron de hambre por su lealtad, al igual que su hija, recibiendo burlas de Rapu por ser el único propósito que tenían.
Con decepción por su ídolo, Gorr arrancó su collar, renunciando su lealtad hasta que Rapu ahorcó a Gorr para matarlo y "ayudarlo" a que su vida encontrará un propósito. Lleno de venganza y rabia, Gorr fue considerado digno por la Necroespada, que lo convenció de buscar venganza, matando a los dioses e ir a las Puertas de Eternidad usando el Rompetormentas para convocar el Puente Bifrost y pedir su deseo contra las deidades. Gorr aceptó la oferta, asesinando a Rapu en su garganta, convirtiendo su piel blanca, sorprendiendo a Rapu porque ahora estaba maldito por la arma, lo que Gorr negó sentir, proclamando su juramento de matar a los dioses, cortando la cabeza de Rapu sin piedad y se arrancó las marcas de su cara debido a sus recuerdos como discípulo de Rapu.[1]
Juramento contra los Dioses[]
Asesinando Dioses[]
- "Yo no soy un hipócrita. Yo si pienso establecer la paz."
"¿Paz? ¿¡Así matando a Dioses inocentes!?" - ―Gorr y Brunnhilde
Iniciando una campaña contra los Dioses de todo el universo, Gorr siguió usando la Necroespada totalmente negra, dándose cuenta que lo estaba matando al ser maldito, pero a pesar de la adversidad, Gorr comenzó a matar a varios Dioses en múltiples planetas para mantener la paz con ayuda de los Monstruos de las Sombras, pero dejando a varios planetas desprotegidos, entre ellos, los Señores del Cielo de Indigarr, causando la invasión de Habooska y su ejército de Booskanos a Indigarr, y aterrando al Consejo de Divinidades.
Ataque a Falligar[]
En algún momento, Gorr se estableció en el Reino de las Sombras, dibujando su plan de llegar a Eternidad. Quedando sin tiempo para encontrar las Puertas de Eternidad, Gorr atacó Alfheim, tendiendo una trampa al Dios Falligar y la guerrera asgardiana, Sif, a quienes enfrentó brutalmente, matando a Falligar y dejando a Sif sin un brazo, advirtiéndole que iría a Nuevo Asgard como su siguiente objetivo, y así adquirir el Rompetormentas.[1]
Ataque a Nuevo Asgard[]
- "Ey, ¿esa es la Necroespada? Qué cool, solo la había visto en los cuentos."
"Jeje, entonces sabes que esto te dolerá."
"El dolor al final no es solo una idea inventada por los Dioses." - ―Thor y Gorr
Horas más tarde al caer la noche, Gorr viajó a la Tierra, dirigiéndose a Nuevo Asgard, observando a todos dormir y para llamar la atención, él convocó a varios de los Monstruos de las Sombras, ordenando atacar la ciudad, aterrando a los asgardianos mientras eran protegidos por los Einherjar y sonriendo con una risa macabra, Gorr vio llegar a Thor desde el Puente Bifrost con el Rompetormentas, sabiendo que así podría cumplir su plan.
Gorr finalmente se dirigió hacia Thor, utilizando las sombras para moverse contra él, esquivando varios de sus ataques hasta intentar usar la Necroespada totalmente negra para atacarlo, pero termino recibiendo un golpe del Rompetormentas, escapando nuevamente para retener a Gorr, atándolo en un auto con varios tentáculos de sombras. Amenazando a Thor con la Necroespada, Gorr se burló porque sabía el dolor que iba a sufrir al saber su poder, tratando de apuñalarlo en el cuello, asustando al Dios del Trueno, que pudo escapar de él.
Usando las sombras, Gorr pudo retener a Thor nuevamente en otro auto para robar el Rompetormentas, desatando su ira, golpeando varias veces a Gorr, rodeándolo junto con Jane Foster y Brunnhilde, preocupando a Gorr por enfrentar a los tres a la vez, por lo que se escapó entre las sombras, secuestrando a varios niños de sus hogares con los monstruos, huyendo de Nuevo Asgard, dándole un incentivo a Thor para enfrentarlo con el Rompetormentas.[1]
Charla con los niños[]
Oculto en las sombras de la jaula de los niños, Gorr escuchó a Astrid contar historias sobre Thor a sus amigos, especialmente la parte en que Thor cortó la cabeza de Thanos, asustando a los niños por la fantástica historia, mencionando su emoción por también cortar cabezas, creando a otro monstruo de las sombras, llamándolo Octy, hablando de forma infantil con la criatura, arrancando su cabeza y aterrando a los niños, quejándose por haber creído que les agradaba el tema.
Debido a los gritos, Gorr siguió asustando a los niños, lanzando la cabeza de Octy, antes de calmarlos, contándole a una niña con un peluche de conejo acerca de su similitud con su hija, hablando de su personalidad amable y su amor por dibujar, preguntándole a los niños sobre como los Dioses debían protegerlos, siendo amenazado por Astrid y los niños sobre como Thor lo vencería al estar en camino hacia él, sorprendiendo a Gorr, quien estaba con esperanzas de confrontarlo, revelando que era la razón del secuestro.[1]
Emboscada en el Reino de las Sombras[]
En la Luna de la Vergüenza, Gorr ocultó a los niños en alguna parte del Reino de las Sombras tras saber la llegada de Thor y su equipo, creando una falsa cabaña como parte de su trampa. Luego de que su engaño fuera descubierto cuando Jane Foster lanzó el Rompetormentas, Gorr sorprendió a Thor en las sombras, quitándose su capucha para verlos, usando varios tentáculos para retener a Thor, Foster y Brunnhilde, arrebatando a Relámpago, el arma de Zeus, de sus manos, y exigiendo a Thor darle el Rompetormentas a pesar de sus amenazas.
Torturando a Thor, Gorr se burló de él por buscar ayuda fallida en el Consejo de Divinidades, reconociendo que eran iguales, antes de escuchar a Brunnhilde quejarse porque no era cierto y le contó sus motivos para formar la paz en el universo, matando a los Dioses, pero Brunnhilde afirmaba que habían algunos inocentes, sorprendiendo a Gorr por su comportamiento, descubriendo que era una valquiria, haciéndola llorar por la Masacre de las Valquirias y los Dioses no la ayudaron, haciéndola desaparecer al humillarla.
Gorr se acercó a Foster, admitiendo que era alguien interesante, notando que también estaba muriendo, lamentando su fatal destino, diciéndole a Foster que él iba a morir como ella, contándole acerca como la Necroespada totalmente negra lo empoderó, al igual que el Mjolnir lo hizo con Foster, pero no afectó en nada en el interior, advirtiendo a Foster que los Dioses la iban a utilizar sin ayudarla, aceptando que nunca habrá una eterna recompensa para ambos, enviándola con Brunnhilde.
Luego de su charla humillante al equipo, Gorr se acercó a Thor, riéndose de él por no salvar a Foster, ya que iba a morir pronto, dándole un abrazo para mostrar a Foster y Brunnhilde como rehenes, sabiendo que ambos sufrían por el amor, contándole a Thor su origen por la muerte de su hija al confiar en Rapu, afirmando que su hija tuvo suerte de morir antes de vivir en un mundo de Dioses crueles, amenazando a Thor con matar a Foster si no entregaba el Rompetormentas.
Gorr estaba a punto de matar a Foster hasta que Thor se vio obligado a llamar el Rompetormentas, destruyendo la cabaña con una gran explosión, haciéndole daño a Gorr. Usando las sombras para escapar de la explosión, Gorr liberó en la luna varios Monstruos de las Sombras en formas gigantes, acercándose a Thor, señalando desear el Rompetormentas, siendo desafiado por Thor para luchar y Gorr comenzó una pelea contra Thor, chocando sus dos armas, repartiendo golpes entre los dos.
Durante la pelea, Gorr pudo defenderse con la Necroespada, antes de ser atacado a la vez por Thor, Foster y Brunnhilde, quien apuñalo a Gorr con Relámpago, haciéndolo sangrar, recuperándose rápidamente para seguir peleando, pero escondiéndose en las sombras, Gorr tomó a Relámpago, apuñalando gravemente a Brunnhilde, atrapando a Thor en varios tentáculos, aunque terminó liberándose y Gorr se tuvo que cubrir de sus rayos, huyendo nuevamente. Cuando Thor y su equipo iban a escapar en el Puente Bifrost, Gorr aprovechó para robar el Rompetormentas mientras sus enemigos volvían a Nuevo Asgard.[1]
Batalla en las Puertas de Eternidad[]
- "Ya perdiste, Lady Thor."
"No te equivoques. ¡Mi nombre es Poderosa Thor!" - ―Gorr y Jane Foster
Viajando al centro del universo con el Rompetormentas, Gorr y los niños secuestrados finalmente llegaron a las Puertas de Eternidad, emocionando a Gorr por cumplir su objetivo luego de meses, comenzando a usar el Rompetormentas, controlando el hacha con varios brazos de sombras para comenzar a abrir las puertas, a pesar de que el Rompetormentas intentaba detenerse, y mientras abría las puertas, Gorr se dio cuenta de la presencia de Thor al salvar a los niños.
Con enojo, Gorr invocó a todos los Monstruos de las Sombras para hacer frente a Thor, pero empoderando a los niños, los monstruos de Gorr fueron atacados por el ejército de niños. Gorr se encontró nuevamente con Thor, iniciando una pelea, cubriéndose con su Necroespada totalmente negra mientras Thor se defendía con Relámpago y era atacado por su arma. En su pelea decisiva, Gorr pudo hacer que Thor quedara desarmado, dándole varios golpes para derribarlo, logrando vencerlo.
Gorr tenía a Thor en el suelo, sacando su Necroespada para matarlo, a pesar de que Thor intentaba cubrirse, Gorr estaba a punto de apuñalarlo, pero Jane Foster apareció montada en Warsong, salvando a Thor con el Mjolnir y Gorr terminó siendo atacado por Foster y Thor, quien recuperó a Relámpago. Gorr se enfrentó cara a cara contra Foster, llamándola "Lady Thor", enfadando a Foster, afirmando ser Poderosa Thor o Doctora Jane Foster, diciendo una frase heroica, atacando a Gorr con un poderoso rayo.
Tras un choque entre ambas armas, Gorr observo a Foster herida, decidiendo atacarla, pero fue confrontado por Thor, intentando superar a Relámpago y para su sorpresa, Gorr vio como Foster lanzó el Mjolnir contra la Necroespada, dividiendo el arma para tener partes de la Necroespada, por lo que Gorr comenzó a rearmar su arma, sin embargo, Foster decidió hacer un último sacrificio, destruyendo el Mjolnir con las partes de la Necroespada, destruyéndola para siempre, horrorizando a Gorr al ver que iba a morir, y rápidamente entró a las puertas de Eternidad.[1]
Reviviendo a su hija[]
Gorr finalmente viajó al Reino de Eternidad, encontrándose con Eternidad para pedir su deseo contra los Dioses hasta que Thor lo interrumpió, exigiéndole no hacerlo, enojando a Gorr porque así podría ser un buen padre, pero Thor afirmó que Gorr no deseaba ni muerte, ni venganza, si no amor, sorprendiendo a Gorr debido a que no querría eso, escuchando a Thor afirmar que era lo que todos querían, pidiéndole revivir a su hija, retirándose para estar en los últimos momentos de Jane Foster, enojando brevemente a Thor por darle la espalda y dejarlo triunfar.
Viendo con tristeza a Thor estar con Foster, Gorr, dándose cuenta que estaba libre de la Necroespada totalmente negra, descubrió que estaba muriendo y recordó a su hija al ver a Thor y Foster, llorando porque su hija viviría sola cuando él muriera, aunque Foster le dijo a Gorr que Thor prometería cuidarla, algo que Gorr agradeció, deseando a Eternidad revivir a su hija como Amor. Al despertar de su desmayo, Gorr vio felizmente a Amor revivida por Eternidad, llorando por ver a su hija otra vez.
Entre lagrimas, Gorr compartió un último abrazo con Amor, disculpándose por todas las atrocidades que causo al matar a los Dioses mientras su hija lo consolaba, perdonando a su padre. En sus últimos momentos de vida, Gorr le pidió a Thor proteger a Amor, promesa que Thor aceptó cumplir para honrar a Foster, antes de que Gorr viera a Amor por última vez a sus ojos, juntando sus manos con ella para luego finalmente fallecer, dejando a Amor viviendo nuevas aventuras con Thor.[1]
Personalidad[]
Antes de su caída, Gorr era un hombre sencillo y devoto que se preocupaba profundamente por su hija y su pueblo, orando lealmente al dios Rapu por la salvación de su pueblo y su hija antes de su muerte. Incluso después de la muerte de su hija, Gorr todavía creía en su ídolo Rapu y cree que Rapu puede llevar a su pueblo a un futuro brillante y traerles una "recompensa eterna" después de todo el sufrimiento que soportó su pueblo. Esto cambió después de que conoció al mismo dios al que rezaba, un ser arrogante y rencoroso que no mostraba empatía hacia los mortales y burlonamente descartó las esperanzas de Gorr de que vendría en ayuda de su pueblo, o que los recompensaría al final de sus vidas, incluso descartando a Gorr como simplemente un discípulo que podría ser reemplazado por futuros. El propósito de Gorr de toda su vida fue derrotado cuando perdió la fe en su ídolo y otros dioses. Mientras renunciaba a su dios, la Necroespada totalmente negra lo llamó y fue invocado en su mano, y decapitó a Rapu, jurando matar a todos los dioses.
Después de adquirir la Necroespada, la corrupción de la espada erosionó constantemente la mente de Gorr, haciéndolo cada vez más vengativo en su búsqueda para matar a todos los dioses, incluso matando a dioses amables como Falligar, que no era arrogante como el ídolo original de Gorr. Gorr creía que todos los dioses eran arrogantes y solo usarían a sus discípulos, como se reflejó cuando le dijo a Jane Foster que los dioses la usaban, quienes no hicieron nada para aliviar su dolor y enfermedad e incluso exacerbaron su cáncer con el uso continuo de Mjolnir. Gorr cree que todos los dioses son igualmente culpables y que realmente está creando la paz galáctica al exterminar a los dioses. Esto refleja que Gorr, de hecho, se volvió loco después de su caída y estereotiparía a todos los dioses como arrogantes. Obtuvo un oscuro sentido del humor que usaría con todos para inquietar a sus enemigos y asustar a los niños asgardianos que tomó como rehenes. También se comportó visiblemente emocionado cuando conoció a Brunnhilde en el Reino de las Sombras. Sin embargo, se podría inferir que a Gorr aún le gustaban los niños después de ser corrompido por la Necroespada, al igual que el amor de Gorr por su propia hija antes de su caída, ya que Gorr había secuestrado a niños asgardianos y, en un retorcido acto de intentar jugar. con los niños, mató a Octyy asustó a los niños en su lugar.
Gorr también era manipulador. En un intento por persuadir a Brunnhilde de que creyera en su punto de vista retorcido, Gorr le dijo que sus dioses no hicieron nada cuando su amante murió luchando contra Hela. Sin embargo, este rasgo manipulador se deriva de sus puntos de vista delirantes, ya que Gorr no pudo ver que no todos los dioses son como él pensaba. La corrupción de la Necroespada también volvió arrogante a Gorr. Incluso después de perder la Necroespada, Gorr le preguntó a Thor por qué Thor se atrevía a darle la espalda, reflexionando que Gorr realmente se había vuelto arrogante y algo condescendiente en sus formas, exigiendo a los dioses que lo respetaran y le temieran a pesar de que perdió sus poderes junto con su arma.
Sin embargo, frente a Eternidad y libre de las influencias de la Necroespada, Thor le recordó a Gorr que su alboroto y odio contra los dioses en realidad estaban alimentados por el amor por su hija fallecida. Gorr se dio cuenta de que con el poder supremo de la Eternidad, podría revivir a su hija a quien extrañaba mucho. Al ver a Thor regresar a Foster por amor después de que le dijo a Gorr que hiciera su deseo de exterminar a todos los dioses a la vez, Gorr se dio cuenta de que no era demasiado tarde para cambiar su forma de vida y resucitar a su hija a quien realmente quiere. Por su propia voluntad, en sus últimos momentos de vida, Gorr eligió el amor sobre la venganza e incluso estuvo dispuesto a confiar a su hija para que fuera criada por un dios.
En última instancia, Gorr amaba profundamente a su hija, como se muestra cuando estaba a punto de llorar mientras le contaba a Rapu cómo él y su gente sufrieron hasta la muerte de su hija. Frente a Eternidad, Gorr también le preguntó a Thor qué tipo de padre sería si detuviera su conquista en el último momento, creyendo falsamente que le hizo justicia a su hija al matar a todos los dioses, cuando en realidad estaba usando la muerte de su hija como una excusa para sus fechorías.
Poderes y Habilidades[]
Antiguos Poderes[]
- Empoderamiento de la Necroespada totalmente negra: Después de obtener la Necroespada, Gorr tomó el objetivo de la espada para la extinción de todos los dioses usándola para matar muchas entidades y viajar en las sombras e invocar a los Monstruos de las Sombras, mientras que la espada lentamente estaba matando a Gorr, con Gorr finalmente muriendo después de su destrucción.
- Fuerza sobrehumana: La Necroespada le dio a Gorr niveles inmensos de fuerza sobrehumana, mucho más fuerte que otras especies alienígenas pero igual a los dioses. Su fuerza le permitió a Gorr absorber y ejercer toneladas de fuerza, lo que le permitió arrancarle la cabeza a Octy con facilidad y ser capaz de rivalizar incluso con Thor, con Gorr capaz de mantener presionado a Rompetormentas, ya que el Puente Bifrost estaba tirando de ambos. Durante su batalla final con Thor, Gorr logró dominar a Thor solo y luego pudo igualar su fuerza cuando Thor lo atacó usando a Relámpago.
- Durabilidad sobrehumana: La Necroespada le dio a Gorr una durabilidad sobrehumana que supera a las especies normales pero es igual a los dioses. Esto le permite recibir muchos golpes de seres igualmente poderosos. En las
Puertas de la Eternidad, Gorr recibió repetidos golpes de Thor y Jane Foster y aún pudo levantarse rápidamente y luchar contra ellos.
- Velocidad sobrehumana: La Necroespada le dio a Gorr una velocidad sobrehumana más fuerte que los humanos pero igual a los dioses. Permitió a Gorr moverse en sus batallas más rápidamente.
- Agilidad sobrehumana: La Necroespada le dio a Gorr una agilidad sobrehumana que supera a muchas especies pero es igual a la de los dioses. Permitiendo que Gorr se mueva con perfecta agilidad, equilibrio, flexibilidad, destreza, equilibrio y coordinación corporal.
- Resistencia sobrehumana: La Necroespada le dio a Gorr una resistencia sobrehumana por encima de muchas especies e igual a la de los dioses. Permitió a Gorr producir menos toxinas de fatiga durante la batalla.
- Reflejos sobrehumanos: La Necroespada le dio a Gorr reflejos sobrehumanos más rápidos que las especies normales pero iguales a los dioses. Esto le permitió evitar muchos golpes tanto de Thor como de los niños que había secuestrado. También fue capaz de esquivar el Mjolnir que le arrojaron a corta distancia y bloquear el rayo de Thor después de que lo disparó.
- Factor de curación regenerativo: La Necroespada le dio a Gorr un factor de curación regenerativo igual a los dioses, lo que le permitió curarse de numerosas heridas, pero conservando muchas cicatrices. También se recuperó rápidamente después de la pelea entre Brunnhilde y los dos Thor.
- Asesino Divino: La Necroespada fue capaz de potenciar a Gorr lo suficiente como para poder ir en contra de los dioses y matarlos. Después de obtener la Necroespada del usuario anterior, Gorr pudo matar a su antiguo ídolo, Rapu, primero clavándole la espada en la garganta y luego decapitándolo. Usando la Necroespada, también pudo matar dioses en su conquista.
- Teletransportación de las Sombras: Con la Necroespada, Gorr pudo atravesar el Reino de las Sombras desde otras sombras. Durante el Ataque a Nuevo Asgard y la Batalla del Reino de las Sombras, Gorr desapareció repetidamente en las sombras y reapareció para dar un golpe sorpresa o evadir los ataques de sus enemigos. Durante la pelea en Nuevo Asgard, Gorr se retiró usando las sombras cuando Thor, Foster y Brunnhilde lo rodearon. En particular, en el Reino de las Sombras, Gorr pudo viajar usando sombras para teletransportarse detrás de Brunnhilde y apuñalarla por la espalda, hiriéndola gravemente, y atravesar el Bifrost para robar a Rompetormentas de Thor cuando trató de escapar de regreso a Nuevo Asgard]].
- Viaje Dimensional: La Necroespada fue capaz de permitir que Gorr viajara de las sombras al Reino de las Sombras.
- Conjuración: La Necroespada le dio a Gorr la capacidad de conjurar Monstruos de las Sombras y armas. Al clavar su Necroespada en el suelo, Gorr podía invocar una variedad de monstruos desde las sombras y ayudar a Gorr en la batalla.
- Llamada de armas: Gorr pudo invocar la Necroespada, incluso cuando Thor y Foster la fracturaron.
- Creación de construcciones: Gorr pudo crear otros elementos para ayudar a unir a sus enemigos desde látigos hasta una jaula gigante. Usó la jaula para mantener a los niños asgardianos como rehenes, en un intento de atraer a Thor al Reino de las Sombras y llevar al Rompetormentas para cumplir su misión.
- Manifestación de tentáculos: Gorr pudo convocar bestias más pequeñas para contener a cualquiera de sus enemigos. En el Reino de las Sombras, Gorr pudo convocar tentáculos para contener a Foster, Thor y Brunnhilde, y envolver tentáculos alrededor de sus bocas para evitar que hablaran, e incluso enviarlos lejos. Además, Gorr puede controlar estos tentáculos para estrangular a Foster en el Reino de las Sombras, casi resultando en la muerte de este último si Thor no hubiera convocado al Rompetormentas. Cuando Thor intentó retirarse a Nuevo Asgard desde el Reino de las Sombras, Gorr llamó a las garras de los monstruos para que se envolvieran en Rompetormentas, y con suficiente fuerza de estos tentáculos, Gorr pudo tomar al Rompetormentas de Thor. En las Puertas de la Eternidad, Gorr usó tentáculos y garras para mantener a Rompetormentas en su lugar mientras abría las puertas a la Eternidad.
- Capacidades de Rompetormentas: Gorr pudo usar brevemente algunas de las habilidades del Rompetormentas.
- Invocación del Puente Bifrost: Gorr pudo invocar el Puente Bifrost para abrir el portal al Reino de Eternidad.
Habilidades[]
- Combatiente experto: A pesar de no tener un entrenamiento de combate formal, Gorr demostró ser un luchador muy capaz. Con su Necroespada totalmente negra, mató a varios seres poderosos, incluidos Rapu y Falligar. Pudo luchar brevemente contra Brunnhilde y Jane Foster, luchar contra Brunnhilde usando tanto a Relámpago como su espada por igual antes de atraparla con la guardia baja para herirla gravemente, e incluso enfrentarse a Thor en la batalla varias veces, casi matándolo en las Puertas de Eternidad. Él hizo que Foster no interfiriera y llegara al campo de batalla debido a que Thor usó el Relámpago, aunque Thor demostró ser un luchador superior al final.
- Dominio de la espada: Gorr pudo manejar hábilmente la Necroespada en la batalla, incluso resistiendo otras armas poderosas como Mjolnir, Rompetormentas y Relámpago utilizadas por los héroes.
- Táctico experto: A pesar de no tener mucha habilidad, Gorr pudo tomar como rehenes a muchos de los niños de Nuevo Asgard para usarlos contra los asgardianos, y pudo engañar al equipo de Thor para que cayera en una trampa para que Gorr robara el Rompetormentas.
Equipamiento[]
Antiguas armas[]
- Necroespada totalmente negra: Después de obtener la Necroespada, Gorr tomó el objetivo de la espada para la extinción de todos los dioses y la usó para matar a muchas entidades y viajar en las sombras e invocar a los Monstruos de las Sombras. Sin embargo, la espada estaba matando lentamente a Gorr y finalmente murió después de su destrucción.
- Rompetormentas: Gorr intentaría robar el Rompetormentas de Thor, debido a su capacidad para viajar con el Puente Bifrost para llegar a las Puertas de Eternidad. Eventualmente se lo robaría al Dios del Trueno para poder entrar con éxito el Reino de Eternidad, aunque Thor finalmente recuperó el hacha.
Relaciones[]
Familia[]
Aliados[]
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Enemigos[]
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Trivia[]
- En los cómics, Gorr el Carnicero de Dioses era un extraterrestre mortal que llegó a odiar a los dioses después de perder a su madre, pareja e hijos. Armado con la Necroespada totalmente negra, Gorr juró vengarse de todos los dioses por no responder nunca a sus oraciones, lo que llevó a un altercado con Thor.
Detrás de escenas[]
- Según Jeremy Slater, los primeros guiones del episodio The Friendly Type de Moon Knight tenían referencias a Gorr en la reunión del Consejo de la Enéada, pero fueron finalmente eliminadas.