- "Al laboratorio de Jane. Rápido."
- ―Erik Selvig a Darcy Lewis
El Apartamento de Jane Foster es el lugar donde Jane Foster y Darcy Lewis vivieron, y usaron como laboratorio cuando se mudaron a Londres.
Historia[]
El apartamento originalmente era propiedad de la difunta madre de Jane Foster, quien previamente vivía en Londres. Cuando Erik Selvig viajó a Londres, descubrió unas extrañas anomalías, por lo que llamó a Foster para reunirse con ella y estudiar su descubrimiento juntos. Foster se mudó al apartamento de su madre al volver a Inglaterra, y junto a Darcy Lewis comenzaron a usar su vivienda como laboratorio también. A pesar de haber regresado a Londres por trabajo, Foster pasaba casi todo el tiempo deprimida en su apartamento, dado que aún seguía enamorada de Thor, quien la había abandonado sin explicación alguna. Cuando Lewis llegó al apartamento a buscar a Foster para informarle sobre el extraño comportamiento de su dispositivo detector de anomalías, se sorprendió al ver que ésta no estaba y había salido.
Tras que Thor viniera a la Tierra y se llevara a Foster a Asgard, Lewis e Ian Boothby regresaron al apartamento, sin saber que hacer y sin saber a quien pedirle ayuda. Mientras veía la televisión, Boothby notó que en las noticias estaba apareciendo el Doctor Selvig del que Lewis y Foster le habían hablado, siendo testigo del arresto de éste por pasearse desnudo en un lugar público. Después de recoger a Selvig del manicomio al que había sido enviado, los tres regresaron al apartamento de Foster, donde siguieron estudiando la Convergencia.
Cuando Thor y Foster regresaron a la Tierra, el primer lugar al que fueron fue al apartamento para reunirse con el equipo. Estando reunidos, Foster le pidió a Selvig prestarle toda su investigación sobre la Convergencia. Gracias a los datos que Selvig había recolectado y el conocimiento que tenían desde antes, el equipo discutió qué podrían hacer para detener a Malekith, ya que lograron predecir que el punto central de la Convergencia sería en Greenwich. Habiendo formulado un plan, todos se equiparon con los postes gravimétricos que Selvig había creado y partieron a Greenwich.
Posterior a la Batalla de Greenwich, Foster, Selvig, Lewis y Boothby regresaron al apartamento, agotados por todo lo que habían vivido. Al cabo de dos días, los cuatro estaban desayunando cuando comenzaron a dudar de la posibilidad de que Thor volviera, con Foster manteniendo la esperanza de volver a ver a su amado.[1] Más tarde, Foster estaba pensando solitariamente hasta que notó que el Puente Bifrost se había abierto en el balcón de su hogar. Al salir, ella se reencontró con Thor y se besaron apasionadamente, listos para seguir con su relación.[2]