- "Pero al estar ahí viendo la ciudad, nadie sabía, nadie estaba ahí, nadie podía verme, ni siquiera me buscaban. Y me vino una idea que me guiaría durante muchos años. El anonimato, Tony. Y gracias a tí, es mi mantra desde entonces, ¿verdad? Es mejor gobernar tras bambalinas. Porque en cuanto le das un rostro a la maldad, un bin Laden, un Gadaffi, un Mandarín, le das un objetivo a la gente."
- ―Aldrich Killian a Anthony Stark
Aldrich Killian fue el fundador y Director General de Ideas Mecánicas Avanzadas. Después de que Anthony Stark rechazó unirse a su investigación, Killian participó en el desarrollo del Extremis junto a Maya Hansen, formado a un grupo de soldados alterados bajo su mando. Para cubrir sus actividades ilegales como ataques terroristas, Killian contrató al fracasado actor Trevor Slattery para interpretar al Mandarín, sin saber que este realmente existía. Killian también conspiró con el Vicepresidente de los Estados Unidos, Rodriguez, en un intento por asumir el control de ambos lados de la Guerra contra el Terrorismo. Sin embargo, después de que Killian secuestrara a Virginia Potts y Matthew Ellis, Stark lo enfrentó y Killian fue asesinado por Potts en la Batalla en el Norco.
Biografía[]
Vida temprana[]
Juventud con discapacidades[]
- "¿Sabes lo que mi padre solía decirme? Era su favorito de varios dichos, 'el ave se queda con la lombriz, pero el segundo ratón consigue el queso.'"
- ―Aldrich Killian a Anthony Stark
Aldrich Killian creció con una serie de discapacidades física que nunca fue capaz de aceptar, y pasó la mayor parte de su vida tratando de superarlas en cualquier forma que pudiera. Su tenacidad y determinación ciega en su lucha por una vida mejor fueron vistos por algunos como irritante, ya que a menudo llegaba a ser muy desagradable. Él no aceptaba que la gente rechazara las tarjetas que repartía, y siendo una persona inteligente, tenía la iniciativa de cambiarse a sí mismo y convertirse en una persona diferente.[1]
Creando el Extremis[]
- "No sigues molesto por lo que pasó en Suiza, ¿o sí?"
"Nunca me enfadaría contigo, Tony, si vengo a agradecerte. Me diste el mejor regalo que me han ofrecido en mi vida. Desesperación." - ―Anthony Stark y Aldrich Killian
En la víspera de año nuevo de 1999 en Berna, Suiza, Killian logró encontrar a Anthony Stark para pedirle que lo ayudara en su proyecto en Ideas Mecánicas Avanzadas, sólo para ser rechazado e ignorado por este último. Aunque Stark le dijo que se reuniría con él en la azotea del edificio, nunca acudió a a la reunión y Killian se quedó esperándolo. Después de asumir que Stark había ignorado su propuesta, Killian consideró brevemente suicidarse. Posteriormente, la soledad que sintió en la azotea le hizo saborear su estado de anonimato, decidiendo trabajar por su cuenta en la creación de un gran negocio encubierto por él mismo.
A pesar de que Stark no contactó con Killian, Maya Hansen terminó llamándolo y se unió a su organización, usando sus diseños para una fórmula llamada Extremis. A través de los años, por medio de la financiación privada de su organización Ideas Mecánicas Avanzadas, Killian creó un equipo para promover la investigación y el desarrollo de Extremis, que impartía niveles inusuales de resistencia y elasticidad a sujetos humanos. A pesar de tener éxito en mejorar la fuerza y la curación, los sujetos de prueba a menudo experimentaban un sobrecalentamiento y, en ciertos casos de uso excesivo del Extremis, éstos terminaban explotando, sin embargo, los usuarios terminaron siendo entrenados para usar y controlar el calor.[1]
Manipulando la Guerra contra el Terrorismo[]
- "A esta hora mañana, tendré en la mano al líder más poderoso de occidente, y al terrorista más temido de la Tierra en la otra. Controlaré la guerra terrorista."
- ―Aldrich Killian a Eric Savin
Después de curarse a sí mismo de su discapacidad a través de la investigación del Extremis de Maya Hansen, Killian realizó muchos experimentos ilegales, de los cuales varios dieron lugar a explosiones en sujetos de pruebas. Killian decidió entonces hacer pasar sus experimentos fallidos como ataques terroristas, pero necesitaba a alguien para cumplir la función de su supuesto líder, un terrorista temido que tomaría públicamente la responsabilidad por dichos "ataques".
Tras investigar la historia de los Diez Anillos, uno de los grupos terroristas más temidos en el mundo, y la forma en que históricamente estaban afiliados con un hombre conocido como el "Mandarín", Killian decidió usar ese nombre para su propio terrorista falso.[2] Él encontró al fracasado actor inglés Trevor Slattery y le pagó con dinero y drogas para que interpretara al Mandarín. Cada vez que uno de los experimentos de Killian con Extremis fallara, causando explosiones y un gran número de víctimas civiles, los hombres de Killian intervenían las señales de televisión y retransmitían las emisiones de televisión del "Mandarín". Rodeado de la iconografía de los Diez Anillos, el "Mandarín" declaraba constantemente que estos supuestos "ataques" eran "otra lección" para el pueblo estadounidense.[1] Sin embargo, ni Killian ni Slattery sabían que el Mandarín era real.[3]
Reunión con Virginia Potts[]
- "Imagina poder entrar en el disco duro de cualquier organismo viviente y re-ordenar su ADN."
"Sería más que increíble. Por desgracia, pienso que sería una grandiosa arma también." - ―Aldrich Killian y Virginia Potts
Killian visitó la Sede central de Industrias Stark para reunirse con Virginia Potts e invitarla a unirse a la investigación del Proyecto Extremis. Potts vio a Killian al entrar en su oficina y se sorprendió por su cambio físico desde la última vez que lo había visto, a lo que Killian señaló lo feliz que estaba por verla y lo bien que se veía ella también. A pesar de que Harold Hogan demostró la desconfianza que le tenía a Killian, Potts le insistió en que todo estaba bien y le pidió retirarse.
Killian le explicó a Potts que la razón de venir a Industrias Stark era simplemente que su empresa, Ideas Mecánicas Avanzadas, tenía potencial para trabajar codo a codo con la empresa que ella dirigía, o por lo menos invertir en sus conceptos que cambiarían el mundo. Killian le presentó su investigación Extremis mediante el uso de holograma de su propio cerebro y le mostró cómo su creación podía alterar el ADN humano para mejorarlo. Killian, entusiasmado, hizo alarde de su comprensión del cuerpo humano y le explicó cómo Extremis podía curar y regenerar las células a un nivel extraordinario. Potts se sintió impresionada por el concepto y su presentación.
Después de la presentación, Potts y Killian continuaron discutiendo el concepto de Extremis. Casi al finalizar, Potts declinó la oferta de unírsele debido a la creencia de que el suero podía ser usado como una grandiosa arma también, la cual ella creía que Anthony Stark desaprobaría completamente. Aunque Killian argumentó que Stark quizá no era la mejor persona para votar sobre el asunto, Potts mantuvo su palabra y le dijo Industrias Stark no trabajaría con A.I.M. sin el consentimiento del propio Stark. Cuando Killian dejó el lugar, expresó su decepción, pero le dio un beso en la mejilla a Potts antes de irse con su guardaespaldas, Eric Savin.[1]
Usando al Mandarín[]
- "Vamos a comenzar. No hablen y no lo miren a los ojos, a menos que quieran una bala en la cara."
- ―Aldrich Killian
Como en otras pocas ocasiones, uno de los experimentos que Killian llevó a cabo acabó poniendo en riesgo a Harold Hogan, quien casi perdió la vida en la Destrucción del Teatro Chino. Cuando Anthony Stark amenazó públicamente al "Mandarín", Killian respondió enviando a sus hombres para bombardear la mansión Stark. Una vez que el ataque fue completado, Killian recibió una llamada de Eric Savin, quien le informó que la mansión Stark había sido destruida con éxito y que Stark aparentemente estaba muerto, aunque nunca encontraron su cuerpo. Killian luego le ordenó a Trevor Slattery transmitir un mensaje haciéndose pasar por el Mandarín nuevamente, atribuyéndose la responsabilidad por el ataque en el Teatro Chino.[1]
Secuestrando a Virginia Potts[]
- "¿Crees que hará algo por ti? Jamás."
"Tu función aquí no es solo motivar a Tony Stark, es más vergonzoso que eso. Aquí eres mi..."
"Trofeo." - ―Virginia Potts y Aldrich Killian
Al enterarse de que Maya Hansen intentó salvar a Anthony Stark en la destrucción de su mansión debido a que él tenía conocimientos para perfeccionar el Extremis, Killian decidió secuestrar a Virginia Potts. Killian llegó al hotel donde Potts y Hansen estaban ocultándose y las atacó, matando al camarero que llegaba a su habitación y sosteniendo por el cuello a Potts al tiempo que exigía saber que estaba haciendo Hansen en la mansión de Stark.[1]
Capturando a Anthony Stark[]
- "En fin, el punto es que desde que ese fortachón con su martillo cayó del cielo, la sutileza se quedó atrás."
- ―Aldrick Killian a Anthony Stark
Anthony Stark fue capturado por Eric Savin cuando se infiltró en la mansión de Aldrich Killian y descubrió la verdad sobre Trevor Slattery. Killian ordenó apresar a Stark en su mansión y, teniendo a Virginia Potts como su rehén, le inyectó Extremis para obligar a Stark a que trabajara con él. Al reencontrarse con Stark encarcelado, Killian reveló la verdad sobre el "Mandarín", señalando que con la creación de terrorista falso, podría controlar secretamente la guerra terrorista infundiendo el miedo. Al notar la falta de interés de Stark en lo que decía, Killian le mostró una proyección en vivo del dolor que Potts estaba sintiendo, en un intento de negociar con Stark la supervivencia de ella a cambio de que éste mejorara el Extremis.
Cuando Maya Hansen, quien también estaba en la habitación, cambió de opinión al ver lo que Killian estaba dispuesto a hacer para chantajear a Stark, trató de obligar a Killian a liberar a Potts, amenazándolo con tomar una sobredosis de Extremis. Aunque Killian inicialmente trató de hacerla cambiar de opinión, rápidamente se aburrió de conversar con Hansen y le dio un disparo, matándola instantáneamente. Antes de retirarse, Killian comentó sarcásticamente que ahora había una nueva vacante importante en Ideas Mecánicas Avanzadas, lo que hizo a Stark llamarlo maníaco. Ante ese comentario, Killian corrigió a Stark autoproclamándose un visionario, aunque afirmando que sí conocía a un verdadero maníaco y que esa misma noche saldría a escena.[1]
Torturando a James Rhodes[]
- "En cuanto la armadura esté en posición, tardaré 10 minutos en tener el control."
"Que gusto. Pero según parece, hay alguien adentro todavía." - ―Eric Savin y Aldrich Killian
Los soldados de Killian capturaron a James Rhodes en Pakistán y lo llevaron a la mansión de Killian, ya que éste último necesitaba armadurade Iron Patrior para secuestrar a Matthew Ellis. Aún después de llegar a la mansión, Rhodes se resistió a salir del traje, el cual había sido inhabilitado. Cuando Eric Savin le comunicó a su jefe que Rhodes se reusaba a salir del traje, Killian llegó y comenzó a aplicar calor con sus propias manos en el abdomen de la armadura, sabiendo que esto obligaría a Rhodes a salir.
Al pasar el rato, Killian hizo que la armadura entrara en estado crítico por la alta temperatura, hecho por el que Rhodes se vio en la obligación de salir. Al salir, Rhodes derribó a Savin, y Killian trató de matarlo escupiendo un rayo de fuego por la boca. Aprovechando que Rhodes estaba sorprendido por los poderes de Killian, Savin se levantó y lo noqueó con un simple golpe. Con la armadura vacía, Killian se sintió orgulloso de lo bien que estaban saliendo sus planes, así que habiéndole dicho a Savin lo cerca que estaban de controlar la guerra terrorista, se puso su traje y se marchó.[1]
Secuestro de Matthew Ellis[]
- "Dígame, ¿qué quiere de mí?"
"Ah, nada, señor. Sólo quería una razón para matarlo, que se viera bien en televisión." - ―Matthew Ellis y Aldrich Killian
Bajo las órdenes de Killian, Eric Savin usó la armadura robada de James Rhodes y se hizo pasar por Iron Patriot para capturar al Presidente Matthew Ellis, a quien Killian planeaba ejecutar públicamente y transmitirlo en televisión. Habiendo tomado el control del Norco, Killian se aseguró de que todo el mundo creyera que el Mandarín sería el responsable del asesinato de Ellis. Además, Killian se coludió con el Vicepresidente Rodriguez para tener de su lado al líder del gobierno, quien accedió a ayudarlo con la condición de convertirse en Presidente y ocupar el lugar de Ellis.
Años antes, el Norco tuvo un accidente en el que millones de galones de petróleo se derramaron en el mar y Ellis hizo que los responsables eludieran a la justicia. Killian estaba hablando con una cautiva Virginia Potts cuando Savin llegó. Killian saludó a Ellis y le explicó que planeaba utilizar el incidente del Norco para justificar sus planes.
Luego, Killian hizo que a Ellis le pusieran la armadura de Iron Patriot y lo colgaran encima de un depósito de galones de aceite, los que al explotar quemarían a Ellis frente a todo el país. Acto seguido, Killian se dirigió a la sala multimedia para revisar que todas las cámaras estuvieran funcionando correctamente en la ejecución.[1]
Duelo final y derrota[]
- "¿Dijiste que querías al Mandarín? Aquí lo tienes. Siempre fui yo, Tony. Desde el principio. ¡Yo soy el Mandarín!"
- ―Aldrich Killian a Anthony Stark
Anthony Stark y James Rhodes se infitraron en el Norco y lo atacaron junto con la Legión de Hierro controlada por J.A.R.V.I.S. Cuando Killian encontró a Stark tratando de salvar a Virginia Potts, lo atacó y destrozó el Reactor Arc de su traje para apagarlo. Con Stark inmovilizado, Killian se agachó sobre él y usó sus poderes térmicos en un intento de calentar la armadura hasta quemarlo, disfrutando la desesperación de él y Potts. Antes de dar el golpe final, Killian le recomendó a Stark cerrar los ojos, pero éste activó una cuchilla en el atebrazo del traje y le cortó el brazo, dejando a Killian a la espera de que su extremidad se regenerara. El brazo incandescente amputado de Killian derritió la plataforma donde estaban y causó que Potts cayera varios metros hacia al centro de un incendio.
Después de Potts aparentemente falleciera, Killian se burló de Stark por fracasar en salvarla y lo desafió a un duelo. Los dos comenzaron a luchar cuerpo a cuerpo en varias secciones del Norco, con Stark alternando varias de sus armaduras, las que Killian iba destruyendo una por una. Finalmente, Killian partió por la mitad la última armadura que Stark recibió, dejándolo indefenso frente a él. Evidenciando sus poderes e incluso quemando su propia ropa con estos, Killian se mofó de Stark confrontándolo por la muerte de Potts, diciéndole que nunca la había merecido.
Tras que Stark afirmara estar de acuerdo, Killian y él vieron que J.A.R.V.I.S. venía pilotando la dañada armadura Mark XLII, la cual se desarmó antes de llegar a Stark. Killian comentó lo cerca que estuvo de hacer que Potts fuera perfecta al inyectarle el Extremis, solo para que Stark le recalcara que ella ya era perfecta y le pusiera cinéticamente el Mark XLII para inmovilizarlo. Luego de hacer que el traje se adheriera a una pared, Stark programó la autodestrucción de éste y mientras Killian gritaba de horror, la armadura explotó con él dentro.
Gracias al Extremis en su cuerpo, Killian sobrevivió a la explosión con graves heridas que lo deformaron. Después de que el complejo quedara en ruinas, acechó a Stark revelándose como el verdadero Mandarín, quien siempre había utilizado a Trevor Slattery como una marioneta. Antes de que Killian terminara el monólogo sobre su filosofía, Potts lo atacó por la espalda con una barra metálica, evidenciando su supervivencia y lanzándolo varios metros atrás. En seguida, Killian se dispuso a contraatacarla, solo para que esta tomara el guante de una armadura de Iron Man y lo derribara otra vez. Desesperado, Killian se puso de pie, solo para recibir un proyectil que Potts detonó frente a él, destruyendo su cuerpo antes de que lograra regenerarse por completo.[1]
Relaciones[]
Familia[]
Aliados[]
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Enemigos[]
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Detrás de escenas[]
- Kevin Feige reveló en una entrevista que los primeros borradores de Iron Man mostraban a un Mandarín con una edad similar a la de Anthony Stark, quien estaría involucrado comercialmente con Industrias Stark. Aunque este personaje se eliminó para darle más protagonismo antagónico a Obadiah Stane, algunas características del Mandarín que nunca apareció le fueron traspasadas a Aldrich Killian en Iron Man 3.
- Shane Black reveló que el rol de Killian en Iron Man 3 originalmente iba a ser retratado por una mujer, quien controlaría a Killian de manera similar a la que él lo hizo con Trevor Slattery. Sin embargo, la idea se descartó debido a que un personaje femenino no vendería tantos juguetes como si fuera masculino. Irónicamente, no se produjeron figuras de acción de Killian tras el estreno de Iron Man 3.
- En un guión eliminado de Iron Man 3, Killian iba a utilizar feronomas creadas a base de Extremis para seducir a Virginia Potts y grabarse a sí mismo teniendo relaciones sexuales con ella, acto que transmitiría en vivo a todo el mundo mientras Anthony Stark compraba herramientas para hacer artilugios caseros.
- Antes de que Guy Pearce fuera elegido para interpretar a Aldrich Killian, Nikolaj Coster-Waldau y Jude Law fueron considerados para el papel. Años más tarde, Law interpretó a Yon-Rogg en Captain Marvel.
- La versión de Aldrich Killian creada por Shane Black pretendía ser la versión oficial del Mandarín en el Universo Cinematográfico de Marvel, no obstante, el lanzamiento de Marvel One-Shot: All Hail the King demostró lo contrario. En 2016, Black confirmó que dicho cortometraje fue en realidad una manera de disculparse con los fanáticos que se mostraron decepcionados con la versión del Mandarín que él creó.
Trivia[]
- En los cómics, Aldrich Killian fue un científico que desarrolló el virus Extremis y lo puso a disposición de un grupo terrorista, solo para suicidarse más adelante.
- En el videojuego no canónico Iron Man 3 - The Official Game se reveló que la conciencia de Killian fue traspasada a M.O.D.O.K. poco después de que el cuerpo físico de Killian fuese destruido.